*Nada se sabe del Presupuesto de Egresos del Ayuntamiento del Pueblo del Hormiguerillo; mucho menos la forma en que se gasta; el gobierno de Angelina Carreño viola la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública del Estado de México y sus Municipios al no hacer público la documentación de la Hacienda Municipal ni el Programa de Obra Pública.
NICOLÁS ROMERO, Méx.- El uso del erario que realiza la alcaldesa Angelina Carreño Mijares se oculta a los habitantes del Pueblo del Hormiguerillo, quienes desconocen cuánto dinero público maneja el gobierno, dónde y cómo se gasta, mucho menos se conoce sí se realiza o no construcción de obra pública.
Así se concluye tras una revisión del portal oficial del gobierno de Nicolás Romero www.nicolasromero.mx donde no aparece de manera pública el Presupuesto de Egresos de 2017 y mucho menos el Programa Anual de Obra Pública. Por tal motivo, al no presentar esos documentos del uso del dinero público, el gobierno de Angelina Carreño viola la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública del Estado de México y sus Municipios.
De acuerdo a la citada Ley de Transparencia mexiquense (disponible enhttp://www.osfem.gob.mx/02_Marco_Juridico/doc/04_LTyAIPEMyM.pdf ), existen Obligaciones de Transparencia Comunes, en su Capítulo I, en el artículo 77 que dicta: “La información correspondiente a las obligaciones de transparencia deberá actualizarse por lo menos cada tres meses”, situación que incumple el actual gobierno emanado del Partido Revolucionario Institucional en Nicolás Romero.
Asimismo, destacar que en su Capítulo II, de la citada Ley de Transparencia mexiquense, existen Obligaciones de Transparencia Comunes, entre ellas: “La información financiera sobre el presupuesto asignado, así como los informes del ejercicio trimestral del gasto, en términos de la Ley General de Contabilidad Gubernamental y demás disposiciones jurídicas aplicables”, situación que también incumple el gobierno de Angelina Carreño.
Es tal el ocultamiento en el uso del dinero público por parte del gobierno de la priísta, que los habitantes de Nicolás Romero desconocen en dónde, cuáles son y cuánto cuestan las obras públicas que construye el gobierno municipal; con tal opacidad también se viola la Ley de Transparencia mexiquense que en su fracción XXIX dicta: “La información sobre los procesos y resultados sobre procedimientos de adjudicación directa, invitación restringida y licitación de cualquier naturaleza, incluyendo la versión pública del expediente
respectivo y de los contratos celebrados, que deberán contener, por los menos, lo siguiente: de licitaciones públicas o procedimientos de invitación restringida y el resultado de la dictaminación de los estados financieros; los montos, criterios, convocatorias y listado de personas físicas o jurídicas colectivas, a quienes, por cualquier motivo, se les asigne o permita usar recursos públicos o, en los términos de las disposiciones jurídicas aplicables, realicen actos de autoridad”.
Asimismo, la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública del Estado de México y sus Municipios, publicada en diciembre de 2015 por el gobernador Eruviel Ávila Villegas, exige que los gobiernos deben hacer público “los informes que dichas personas (a quienes se) les entreguen sobre el uso y destino de dichos recursos públicos vía: las concesiones, contratos, convenios, permisos, licencias o autorizaciones otorgados, aprovechamiento de bienes, servicios y/o recursos públicos; las estadísticas que generen en cumplimiento de sus facultades, competencias o funciones y los informes de avances programáticos o presupuestales, balances generales y estado financiero”, situación que se oculta en el gobierno de Angelina Carreño, el cual no transparenta el Programa Anual de Obra Pública.
Cabe destacar que tal opacidad del gobierno priísta es la respuesta a la documentación pública del mal manejo del dinero público ejercido el año anterior, donde en 2016 la alcaldesa Carreño destinó más del 40 por ciento del dinero público en el pago de elevados salarios de ella y sus funcionarios (donde se documentó que ella ganaba 190 mil pesos mensuales que le dejó ganancias personales superiores a los 2.3 millones de pesos al año con cargo al erario), pero en cambio destinó menos del 10 por ciento a la construcción de Obra Pública; esto significó un gasto superior a los 322 millones para “Gastos Personales” o nómina de la burocracia, mientras que en “Inversión Pública” sólo se destinó un aproximado de 35 millones de pesos del total de los más de 774 millones de pesos que manejó el gobierno municipal en 2016, de acuerdo a los datos del Presupuesto de Egresos 2016 del Ayuntamiento de Nicolás Romero.
Este municipio lleva más de una década gobernador por un grupo de priístas que sólo se cambian los puestos, como el ex alcalde Alejandro Castro Hernández –esposo de Angelina Carreño y hoy delegado de Prospera-; así como el dos veces alcalde Martín Sobreyra Peña y de quien su hija Monserrat Sobreyra hoy es diputada federal.
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