LA PERTINENCIA DE UN DEBATE EN ATIZAPAN

No solo es pertinente, es necesario y urgente un debate de los candidatos a la presidencia municipal por Atizapán de Zaragoza; ya que los ciudadanos atizapenses contagiados por la movilización juvenil quieren un verdadero cambio independientemente del partido que gobierne y de eso se están dando cuenta los políticos, ya que la sociedad esta harta de promesas y visitas que nunca se repiten. Lo que quieren son hechos y menos palabras para tener certeza de respuestas a sus necesidades. Todos los candidatos tiene ya experiencia en ser postulados, otros ya tiene experiencia como parte de un gobierno y otros, no han sido gobierno pero tienen un programa que sería muy bueno implementar al caso específico de Atizapán. Las campañas se van desarrollando de la misma manera en que siempre se dan: muy poca conciencia de la ciudadanía y una comunicación lineal que replica el modelo comunicacional de siempre, vertical y sin capacidad de interacción con el ciudadano. Pero, uno de los elementos importantes es la coyuntura que existe a nivel nacional, no solo por la elección en sí –debido a la gran incertidumbre que la acompaña- sino porque las variables que tenemos son dos: una, los estudiantes y el movimiento #YoSoy132, con demandas especificas y desarrolladas no solo por la apertura democrática de los medios de difusión masiva, sino porque también reclaman un derecho fundamental: la libertad de expresión –incluyendo la libertad de decisión-; dos, el cansancio social ante gobiernos que han resultado ineficaces del PRI y del PAN. La única opción que queda como viable y a probar es la de la izquierda, misma que ha dado resultados en los lugares donde se han instaurado gobiernos de esa denominación, claro esta que tampoco se trata de una cuestión de magia y perfección, también se debe reconocer que a la izquierda también le hacen falta cosas. Más allá de la reflexión anterior, debemos en todos los niveles tener un ejercicio democrático como lo son los debates, no debe haber solo en la competencia para la presidencia de la república, también para el acceso a los otros cargos de gobierno, puesto que así el ciudadano se iría comprometiendo más en estar atento de lo que sucede en ese nivel y sobre todo se le obligaría a estar más educado en temas políticos, que al final son los que le afectan directamente en su vida diaria. También el debate, permitiría y obligaría a los candidatos a estar mejor preparados y no ser improvisados de ninguna forma, los obligaría a hacer planes de gobierno reales y propuestas concretas y puntuales sobre los problemas que afectan a la localidad que se quiera representar, se dejaría atrás la propuesta “diseñada” a lo “loco” y sin sustentos previo estudios y análisis serios por parte de especialistas. En suma obligaría a que todos entremos en la dinámica de la real y verdadera cultura política democrática, donde el ciudadano exige, el gobernante responde y donde ambos trabajan por mejorar su ciudad y su país. Luis Reyes Sociólogo y analista y consultor en marketing político.