*Apostados en la entrada al palacio de gobierno, habitantes exigieron castigo para el feminicida de la joven Verónica Guadalupe Benítez Vega, asesinada hace unos días y que representa al menos el tercer feminicidio en lo que va del año 2017 en este municipio, de acuerdo a denuncias ciudadanas; a pesar de ser un municipio sin declaratoria de Alerta de Género, existe una elevada cultura machista que da origen a la violencia contra la mujer, pues en este municipio se han cometido al menos 25 violaciones sexuales en lo que va de 2017, de aceurdo a cifras del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
NICOLÁS ROMERO, Méx.- Ya basta de violencia contra la mujer, ya basta de delincuencia y feminicidios, que renuncie la alcaldesa Angelina Carreño Mijares, fue el grito de exigencia de miles de habitantes de este municipio que se manifestaron en la entrada de las oficinas del gobierno municipal para exigir seguridad,
Habitantes de Nicolás Romero exigieron castigo para el feminicida de la joven Verónica Guadalupe Benítez Vega, asesinada hace unos días y que representa al menos el tercer feminicidio en lo que va del año 2017 en este municipio, de acuerdo a denuncias ciudadanas.
Los manifestantes exigieron seguridad pública y señalaron a la alcaldesa Angelina Carreño de permitir el incremento de la delincuencia por sus fallidas decisiones de no apoyar a los policías municipales con gasolina para las patrullas y mejor armamento, mucho menos buenos salarios, “los policías tienen que pedir o unas veces extorsionar a los ciudadanos para que les den dinero porque ganan salarios de miseria o no les da el gobierno gasolina para los patrullajes”, señalaron los quejosos.
El feminicidio de Verónica Guadalupe Benítez Vega, de 21 años de edad, ocurrió en el paraje La Biznaga, del poblado de San José El Vidrio, en Nicolás Romero, donde reportes policiacos confirmaron que el esposo de la occisa, Luis Ángel Reyes, de 23 años, se declaró culpable del feminicidio, el cual cometió al asesinar a la joven golpeándola en la cabeza con rocas y tabiques.
Nicolás Romero es un municipio sin declaratoria de Alerta de Género, pero con una elevada cultura machista que da origen a la violencia contra la mujer, pues en este municipio se han cometido al menos 25 violaciones sexuales en lo que va de 2017, pues cifras del Sistema Nacional de Seguridad Pública detallan que en enero de este año se reportaron tres violaciones sexuales, en febrero siete, en marzo otras siete, en abril dos y en mayo seis ataques sexuales reportados.
Otra muestra de la inseguridad que se vive en Nicolás Romero son las estadísticas del SNSP que refieren al robo con violencia de vehículos, pues en enero se cometieron 20 delitos de este tipo, en febrero 14 y en marzo otros 14 automotores robados, mientras que en abril se robaron otros 14 unidades y en mayo 15; pero el robo de vehículos sin violencia también cuenta: en enero dos, en febrero 28, en marzo 33, en abril 43 y en mayo 34 automóviles fueron robados.
Mientras tanto, el robo con violencia de negocios sigue ocurriendo en Nicolás Romero, pues las estadísticas del SNSP reportan 20 casos, en febrero 9 y en marzo 10, en abril otros diez casos y en mayo seis; por otra parte el robo con violencia de casa/habitación se reportó una vez en enero y otra más en febrero, en marzo y abril tres veces se reportó este delito y en mayo dos; pero el robo sin violencia a casa/habitación se reportó: 10 veces en enero y otras 10 en febrero, en marzo y abril cuatro casas en cada mes y una en mayo.
Cabe destacar que las cifras del Sistema Nacional de Seguridad Pública se basan en los reportes de la Procuraduría de Justicia del estado de México, es decir, el número de carpetas de investigación abiertas por denuncias interpuestas ante la autoridad, pero no contemplan la llamada cifra negra, que son los delitos que se cometen pero no se denuncian ante las autoridades de gobierno.
Por último, referir que la exigencia de los habitantes de Nicolás Romero también fue de renuncia de la alcaldesa Angelina Carreño, pues la inseguridad se ha apoderado de Nicolás Romero, ante la falta de compromiso de la alcaldesa emanada del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y esposa del ex acalde y hoy delegado de Prospera, Alejandro Castro Hernández.
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